ELEGANCIA NATURAL

Es un ejemplo clásico de lo que debe ser la elegancia. SAR la infanta Dª Elena, desde que se quitó de en medio al muermo de su ex marido, está radiante, elegantísima, guapa, simpática, - siempre lo fue - impresionante. He aquí la última foto de la agencia EFE, publicada en ABC. Todo un ejemplo de elegancia, alegría y españolidad. Vean, contemplen y alégrense.

Pues por esos raros motivos de la informática, que me son totalmente arcanos, no he podido entrar la fotografía de la Infanta: es igual, estaba estupenda. Si consigo hacerme con la solución, insertaré esa foto. Perdón y hasta luego.