HOY VUELVO

 

¡Albricias! ¡Albricias! Primero, porque vuelvo a escribir después de dos meses de secano en la materia y segundo porque, ya entrados en la Feria Taurina de San Isidro, ayer Alejandro Talavante ha cortado dos orejas bien ganadas a un buen toro de El Ventorrillo. Magnífica faena, realizada en un ladrillo, como lo schotises, con una quietud y sangre fría impresionantes; hubo momentos en los que se erizaba el vello al contemplar cómo el animal pasaba a escasos milímetros del cuerpo del torero. ¡Colosal! - calificaba mi vecino de localidad, Ricardo, la faena o faina, que dice el torero catalán Bernadó.

 Volviendo a mi ausencia: a punto estuve de incluir en este blog mi historia de los idiotas que en el mundo han sido, pero me emperecé porque son tantísimos que no sé si podré llegar ni siquiera a escribir un resumen de ellos. Dios dirá.

Hoy nueva corrida que promete: toros de Núñez del Cuvillo para El Juli, Sebastián Castella y José Mª Manzanares. Juli y Manzanares llevan una temporada estupenda, con un montón de salidas a hombros, indultos de toros, éxitos a porrillo; por ello, es de suponer que Castella se pique y quiera competir en buena ley con los dos amos del toreo.

Sobre Juli, hay quien dice que es un torero vulgar. Miente quien tal cosa diga, o no sabe nada de ésto del toreo; Juli es un lidiador como pocos, dominador, largo, honrado y buen estoqueador. Manzanares está que se sale y es un artistazo. Esperemos que los toros respondan al interés que los diestros ponen en esa ganadería.

Una última cosa. Mi amigo Fernando María-Tomé Fernández Dicenta, amigo del alma, amigo de la infancia, compañero de pupitre mío desde los años escolares, ha cumplido 70 años y lo vamos a celebrar en casa de su hija María. Yo era la sorpresa pero el muy ladino se lo ha descubierto a las chicas, María y Ana, su mujer. Ya ni soy sorpresa ni nada. Bueno, lo importante es que nos volvemos a reunir con toda esa familia tan entrañable para mí. ¡Bendito sea Dios que nos da la oportunidad de reencontrarnos!

Hasta pronto.